Seducción: traductor simultáneo (3)….
(Escrito el 01 de noviembre de 2009. Para ver la PRIMERA PARTE: CLICA AQUÍ. Para ver la SEGUNDA PARTE: CLICA AQUÍ).
Si esperas a que ella dé el paso, puedes tomártelo con calma. Mucha calma.
¿Por qué?
Porque, sencillamente, ese no es su trabajo. Su obligación es sólo darte señales codificadas. La tuya, interpretarlas adecuadamente, crear las condiciones necesarias para la escalada y avanzar cada vez que puedas hacerlo. Si te falta el coraje para mover el culo cuando la luz está verde o no dispones del decodificador adecuado, adivina qué.
Exacto. Te quedas a dos velas.
Después de todo, ese no es su problema. Es TU PROBLEMA. Si no entiendes sus mensajes o no eres capaz de actuar sobre ellos, le estás demostrando que no estás a su altura como hombre. Y eso es algo que ella no puede premiar. Sus genes no se lo perdonarían nunca.
Personalmente, hace tiempo que dejé de tener ese problema. Miraditas empieza a intuirlo. Anoche supe interpretar correctamente sus señales y nos besamos tras cruzar dos frases. Y hoy, con unos pocos mensajes, Miraditas me ha dicho en su idioma venusiano que necesita ser rescatada.
Ahora hablamos por el Messenger. Afortunadamente para ella, al otro lado de la pantalla tiene un Aven que sabe hacer su trabajo.
Miraditas: Con que xxx (xxx es mi graciosísima dirección de messenger), ¿no?
Mario Luna: Me alegro de que te guste.
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