Unos segundos y estaríamos rondando las cinco de la tarde. Mario y yo estábamos casi preparados (nunca se está del todo, jeje) y nuestros alumnos se encontraban reunidos en la puerta del hotel.

Fui a recogerlos algo nervioso, me suelo emocionar. Sé que esas personas que están ahí, esperando, son gente maravillosa. Personas con la determinación de dar este gran paso: coger las riendas de sus vidas y reconducirlas en el aspecto emocional y sexual y están dispuestas a darlo todo.

Muy grata fue la sorpresa cuando pude ver algunas caras ya conocidas de talleres anteriores:

Utilizaré sólo nombres de pila por privacidad y si alguien prefiere que lo modifique sólo tiene que notificármelo, ¿de acuerdo?

Prosigo… ¿Por dónde iba? ¡Ah, sí! Caras conocidas.

[mailpress]

Alex, un hombre extraordinario, capaz de vibrar y envolver con ello, al que sólo le queda creérselo un poquito más y arriesgar algo. Seguramente ahora ya lo haya hecho y esté viendo resultados. Buscaba divertirse y si no resulta que es un gran actor me da que lo consiguió.

Y Sergio, con unas mejoras notables desde entonces. Ese cambio de look muy positivo y una mayor experiencia se percibían sólo ya en su comunicación no verbal.

También reconocí a Xisco, con el que coincidimos en una pequeña charla que dio Juggler, no mucho tiempo atrás, en Barcelona. Venía con unas expectativas muy positivas y con muchas ganas de mejorar. Una mentalidad de crack. Irradiaba mucho optimismo.

El resto eran caras, miradas, personalidades nuevas… Apasionantes todas, por cierto.

Todos nos sentamos y cómodamente empezó Mario con su minipresentación. Luego le seguí yo y uno a uno todos fueron dándose a conocer al grupo.

Recuerdo el contraste entre las miradas. De los que ya estuvieron con nosotros e irradiaban seguridad y los que venían por primera vez y parecían algo desconfiados.

Puedo recordar a Fire, un apuesto galán ávido de conocimiento y algo escéptico conmigo al principio… Suele sucederme con personas carismáticas… Quizá puedan intimidarse un poquito, pero sé que cuando me conocen se deshacen de todos esos prejuicios y quieren aprovechar hasta el último segundo conmigo. Yo también, lo único que soy paciente. ¿Verdad, crack? Desde aquí un abrazo, una noche inolvidable. (No peséis mal, ¿eh? Jeje)

También teníamos a otro Alex (Políglota). Una ficha, que digo yo. Sólo le queda aprender a abrir en frío… El resto no es muy enigmático que digamos. Jeje… ¿Cómo lo llevas… ahora?

Marcos, que buscaba desenvolverse mejor. Con un trabajo muy interesante, DJ y otras cualidades que aprendería a amortizar.

Gonzalo, un joven cuyo uno de sus problemas era que conocía a demasiada gente, jejeje. Para salir teníamos que ir con pies de plomo. Su juego era muy bueno y con unos retoques a saber lo que estará haciendo ahora por ahí suelto. ¡Pillín! Un abrazo.

Alfonso, del otro lado del charco y responsable de que muchos de nosotros pasemos gratas horas de diversión y entretenimiento delante de una consola. Con un miedo especial a la apertura y que afrontó como un verdadero crack. ¿Recuerdas el último set? Mi enhorabuena.

Y, por último, he dejado a Nando. Un hombre cuya determinación me pareció digna de alabanza. Eso es un ejemplo de voluntad. Con unos retoques en el look y trabajando la Perspectiva del Yo, pues toda su vida ha sido muy lógica, se comerá el mundo. Un abrazo y toda mi admiración.

Recuerdo que estuvimos trabajando abridores, haciendo ejercicios de escalada, etc. Todos eran participativos y el nivel, a pesar de ser contrastado, tenía equilibrio.
En el descanso dedicamos los ejemplares de los libros que trajeron los alumnos.

Aprovecho para dar las gracias a Mario por hacer todo esto realidad y permitir, entre otras muchísimas cosas, firmar en su libro como si fuera también mío. (Paro que si no me emociono).

Al final concretamos que saldríamos por el ‘borne’. Y nos despedimos para cenar.

El borne.

Empezamos con algo de calentamiento callejero. Ciertos abridores directos, arriesgando un poco para entrar en calor. No fue mal aunque tampoco pudimos calentar mucho. Al poquito comenzó a llover y tuvimos que dejar a un set de 4 francesitas que nos dieron sus teléfonos para verlas más tarde. También fueron abandonados los sets que abrieron nuestros alumnos.

Dividimos dos grupos: Uno con Mario y el otro conmigo. Y entramos en un irlandés. A partir de ahí Mario y yo no nos vimos el pelo.

Comencé abriendo un set 3 mixto. Al poquito estaba manteniendo una agradable conversación con el chico de Europa del este mientras dos de mis alumnos hablaban con las dos chicas también de Europa del este.

En ese momento se encontraban tres de mis chicos parados. Me giré con ellos y, como no actuaban les introduje en un set que tenían detrás de tres o cuatro chicas.

El chico con el que hablaba nos invitó a todos a una ronda. Muy agradable, pero no era mi intención caer tan simpáticos, jeje.

Pronto volvían los que habían abierto el otro set diciéndome que no habían sabido continuar. Sin problema, entraron dos de ellos en este set en lugar de los que ya estaban para calentar un poco y cogí al resto para entrar más adentro del irlandés y abrir un par de sets más. Uno de dos y otro de tres.

Mario ya había pasado por allí con lo que fue muy gracioso. Enganchamos todos y lo pasamos muy bien.

Un cuarto de hora más tarde, cuando todos estaban acomodados y más a gusto abrí un set de inglesas. Estoy con el tema de practicar inglés y… toda oportunidad es poca.

Parece que era una despedida de soltera. Enganché muy bien y pronto me encontraba falcado en la barra. Fueron llegando mis chicos y distribuyéndose un poco con cada chica. Habían tres muy monas TB8 y otras dos no tanto, pero muy majas, jeje.

Algunos cerraron con teléfono, yo hubiera querido cerrar con algo más… pero no era la noche. Mi sentido de la responsabilidad me lo impide.

Con ese set sí que estuvimos cerca de la media hora jugando mucho y divirtiéndonos en cantidad. Fotos, CTF, etc…

Recuerdo que Alex me preguntó: -¿Y ahora qué se hace?

Nú:- ¿Has fijado objetivo? Debes fijarlo y luego seguir las escaladas… ¿Cuál sería la próxima tal y como estamos?
Alex:- ¿Personalizar?
Nú:- Lo que yo te diga… Lo tienes. Lo único que debes ser consciente. Aquí no estoy progresando más porque no es lo que toca ahora pero… Como puedes ver estamos falcados en la barra y ellas alrededor y gritando a carcajadas en ciertos momentos… ¡Somos los reyes de la sala! Ahora, la rubita que tengo a mi izquierda está a puntito. Ya le he metido algún ADIs y ha respondido perfectamente. Ahora tendría que aislar, pero no quiero perderos de vista.
Alex:- Jejeje. Entiendo-.

Finalmente nos despedimos. No querían que nos fuéramos. Pretendían venirse con nosotros pero muy diplomáticamente las disuadimos.

Luego hablan mal de las inglesas, jejeje (es broma). A ver si me mandan alguna fotito que estaban curiosas.

Cambiamos de pub y paradójicamente no habían TBs. Así que tras comprobar que la disco más próxima estaba hasta arriba de gente por entrar decidimos irnos a una en la playita que tenía muy buena pinta: Opium mar.

Opium mar.

Para entrar o bien venías con un excedente de TBs o bien ponías cara de mafioso importante y tenías algún enchufillo.

Por suerte, Alex, el políglota del grupo, conocía a alguien de dentro y nos dejaron entrar, nada más y nada menos que a 11 tios.

Eso sí, parecía que íbamos a entrar a un avión. Nos hicieron despojarnos de todos nuestros adornos. Piercins incluidos.

Con ese pretexto abrí al set de atrás 2TBs y un chico. Muy majos. Juego de roles somos mafiosos y no se fían… Nos echamos unas risas.

Por fin entramos. Mario y  yo intercambiamos grupos, nos volvimos a vestir, jejeje. Y ¡Adelante!

Perdí a dos de mis chicos que no se enteraron de que habíamos cambiado y sólo me encontraba con Fire y Sergio y, en frente, sentaditas en un sofá, tres pivones italianas TB9s que tardamos cero coma en abrir. Esta vez fue Sergio, ejecución perfecta falcándose enseguida al lado de una de ellas. ‘Chapó’.

Yo me senté en el otro lado y Fire estaba fuera. Se sentó en el sofá de enfrente, cerquita, pero esa no era la maniobra correcta. No me dio tiempo a decírselo, él ya sabía que no era el camino y, muy hábilmente, se metió entre ambas chicas. Le hicimos un hueco y por fin estábamos todos falcados y semiaislados. Un crack, lo que yo os diga.

Y ahí estábamos, con tres preciosidades que quitaban el hipo.

Pero Fire se veía el percal y dijo:- Núcleo, estamos de puta madre y aquí puede haber tema pero… No me molaría acabar la noche ya. Quiero aprovecharte más.

Núcleo:- Es totalmente comprensible. Y es lo mejor que puedo oír. Yo también me quedaría a vivir con esta preciosidad pero… queremos la caña no el pescado.

Estuvimos un poquito más. Pensé hacer CTF pero como sólo estaba de vacaciones y no vivía allí lo vi innecesario y aborté.

Así que no adentramos. Estuvimos trabajando posicionamiento en grupo. Tema de miraditas, gestos, etc. Comunicación no verbal en sala.

Un par de chicas estaban en la barra, recibí algún que otro IDI y cuando terminé de explicarles el tema aproveché la cobertura para preguntarles a cerca del otro lado de la disco. Allí se suponía que estaban Mario y mis alumnos perdidos.

A pesar de lo indirecto del abridor:- ¿Cómo se va al otro lado?-. Enganché con el set. Al rato entró Sergio y estuvo trabajando un poco. Perdí a Fire un poco de vista y, a pesar de querer intercambiarme con él no logré localizarlo. No quería que la TB se percatase de que buscaba a alguien para intercambiarme.

Nos despedimos de ellas, TB 8,5 y TB8… Una de ellas más alta que un pino y, a pesar de que luego querrían continuar con nuestra compañía, había más trabajo que realizar.

Por fin divisé a Fire, estaba con Xisco y alguna cosita habían probado.

Técnicamente ya había concluido el taller pero por gente así… lo que haga falta.

No obstante encontré una preciosa mujer, curiosamente llamada Linda, con la que entablé una conversación muy agradable y cerré con TLF.

Allí ya nos juntamos prácticamente todos y estuvimos por la terraza abriendo más sets, socializándonos y divirtiéndonos mucho.

Mario habló con cada uno de ellos y les dio los últimos retoques para que se encauzaran a partir de ese instante.

Cuando nos quisimos dar cuenta eran las 8, estaba amaneciendo y el mar junto con la playa eran un escenario de lo más acogedor.

Fire probó el:- Fóllame si me equivoco pero te llamas Patricia… Jajajaja.

Hablamos con un set de guiris que se bañaban, nos hicimos algunas fotos y recogimos los bártulos. A Mario y a mí nos quedaban sólo 3 horas de sueño por delante antes de regresar para nuestra tierra.

Estoy seguro de que me dejo más cosas. Imaginaos toda una noche de sargeo con diversión y mucho ánimo. En cualquier caso, de allí saldrá algún que otro instructor.

Fue un día y una noche para la nostalgia.

Animaos a comentar… compis. Hay muchas experiencias de la noche que desconozco y me gustaría que compartierais.

Espero veros pronto y…
¡Un abrazo!