Seducción y subconsciente III, por Mario Luna
En Seducción y subconsciente y Seducción y subconsciente 2 descubriste que tu mente subconsciente te arrastra por defecto a tu “yo frusco” y que, para colmo, lo hace por tu bien. Al menos, por lo que hubiera sido tu bien hace 200.000 años. O sea que TE QUIERE, PERO SE EQUIVOCA. Por así decirlo, su «visión» del mundo se ha quedado anclada en el pasado.
Aprendiste que para cambiar cualquier conducta de forma duradera, debes: 1. Identificar la intención positiva de dicha conducta, 2. Perdonarte y aceptarte (lo que se resiste, persiste), 3. Escoger un comportamiento potenciador que sustituya al limitante y 4. Dotar al comportamiento potenciador de un beneficio similar al que obtenías con tu conducta limitante.
También comprendiste que, para tu subconsciente, dejarte sentir confianza y seguridad es como asumir que ocupas un puesto elevado en la jerarquía de la tribu. Por lo tanto, no va a permitirte actuar como un hombre de elevado estatus a menos que considere que es seguro hacerlo.
La pregunta que nos hacemos ahora es: ¿qué hace falta para convencerlo de que, efectivamente, cuentas con los recursos necesarios para asumir dicho papel?
[mailpress]