El natural.
Nunca lo diríais. A simple vista, es un chico «mono» sin más atractivo que la media de tíos de su edad. Bajito, delgado, de aspecto aniñado…¿quién pensaría que este pequeñín lleva dentro una bomba sexual? Exacto. Nadie, ni siquiera su objetivo lo piensa…hasta que es demasiado tarde.
Ha venido a pasar unos días conmigo, ignorando mi advertencia: «estoy loco, colega, ya lo sabes. Voy a presentarte a tías constantemente. Y vas a tener que hablar en inglés». Acepta igualmente, para mi sorpresa. El 90% de mis amigos «anteriores» huye ante la insinuación de conocer TB’s. El natural -en cambio- asume que será divertido…
En una fiesta de pueblo, casi 10.000 personas saturan las calles y plazas. Hay tantos sets que nuestros radares enloquecen…tengo la misma sensación que cuando fui a un «bufet libre» por primera vez, es imposible abrir todo lo que hay.
Mi primer filtro: edad, mucha quinceañera suelta.
Segundo filtro: número, dejaremos los sets grandes para otra ocasión.
Abro diversos sets probando abridores circunstanciales, funcionales y enlatados. Sé que me toca a mí hacer de tanque, el natural no abrirá…de momento. Engancho un set, le introduzco hacia una TB que pueda encajar con él mientras yo me quedo con el resto del set. Se me descuadra el invento cuando aparece una nueva TB poco receptiva. Me tacha de cosas muy poco bonitas, las enfrento con humor y algún nega gracioso (necesito ADC extremo!!), mi objetivo inicial se pone algo nerviosa pero se parte de la risa con mis bromas.
Al ver que no me desarma con su arpifaz, la TBborde abandona el set y me quedo con mi TBmaja. Pero el esfuerzo me pasa factura, estoy fuera de estado y cuesta horrores mantener viva la interacción…ya sé que este set no será bueno en cuanto TBmaja sigue buscando a TBborde solicitando «aprobación», quiero darle tiempo a mi natural para que cierre, pues su TB se lo está pasando en grande con él. Exprimo todos mis recursos, hago malabarismos verbales para mantenerme «vivo» en un set muerto, incluso cuando TBborde vuelve con otra amiga dispuesta a «cerrarse» con TBmaja. Hasta que me harto, diviso decenas de otros sets receptivos y decido salir de ahí. El natural no ha cerrado….¡porque no sabe cómo hacerlo! Su TB pone cara de corderito degollado cuando marchamos, sus amigas se alegran de que ella tampoco haya ligado. ¡Siguente…!
Un set de dos, receptivo en un principio pero mi TB se «cansa» de los pocos avances que hago, comienza a aburrirse y no encuentro recursos de maximización adecuados para ella. La estoy perdiendo y me invade sensación de derrota, pues el natural está haciendo disfrutar a su TB como una loca con no sé qué historia…tampoco la cierra.
En el tiempo que pasa hasta nuestro siguiente set, le instruyo en cierres y trato de aprender cómo maximiza el estado de las TB’s. No lo sabe explicar…pero yo le voy observando en los sets siguientes, fáciles y muy adecuados para él por edad y altura (las bajitas le van mejor…) . No tiene que ver con su conversación, sino con su actitud y lenguaje corporal. Trato de imitarlo torpemente, aunque mi juego verbal y estructurado también sale en cuanto entro más en estado. Estoy aprendiendo, disfrutando, recibiendo información valiosa de mi colega en cada interacción. Él tarda pocos sets en tender bien cebos y premios, empieza a cerrar. ¿Cómo puede aprender tan rápido?
Varios días después, ha cerrado varias TB’s con messenger para «continuar» la partida donde mejor se desenvuelve. Le falta escalar más rápido, pues su juego es muy muy lento. Primero las conoce, las hace sentir cómodas y luego a través de internet comienza su fase de valor con muchísimo ADC (es increíble la cantidad de tiempo que las hace esperar para cada respuesta, y su «chulifresco online» merece un capítulo aparte). No llega a la cita hasta que ellas le tienden cebos del estilo «algú día te llevaré a tal sitio», o «me encanta ese bar, deberíamos ir un día». Algunas le solamiguean por ser tan indirecto, pero creo adivinar que su experiencia conmigo en Mallorca le ha hecho un poquito más agresivo. Bromeamos con la idea de que me mencionará cuando escriba su propio método de seducción…¿o le citaré yo a él?.
Conmigo tus «trucos» no funcionan.
Qué bien se está en la piscina. No hace excesivo calor, y agradezco tener amigos con poder adquisitivo alto. Como mi amigo no está, he llamado a TBhermanita. Nos gustamos, pero no quiere ser «una más». Lo acepto, TBhermanita me cuida mucho y nos lo pasamos bien juntos. Por supuesto, sigo tirándole los trastos a la mínima oportunidad, pero en esta ocasión se está pasando:
-Hermanita, si continúas hablándome tan bien de tu amiga TBdeportista, me obligarás a pedirte su número.
Risas. Pero continua cualificando a su amiguita.
-Hermanita, recuerda que yo sí la he visto en foto, y está muy buena.
-¿Te atreverías a llamarla?- Pregunta maliciosa ella.
-Por supuesto.
Antes de un minuto, tengo el móvil de TBhermanita en mi mano, ha marcado el número de su amiga y ésta ha contestado. Es simpática, tiene voz dulce y está muy sorprendida por la llamada. Trata de saber quién soy, le voy dando pistas, tal vez demasiadas…
-Oye, ¿tú no serás el amigo de TBhermanita «que liga mucho»?
Trago saliva. Mi «hermanita» ha contado más cosas sobre mí de las que yo pensaba.
-Bueno, tal vez es un modo muy simple de explicarlo, pero sí que ligo de vez en cuando.
Su voz cambia, su tono se vuelve más agudo y habla de forma amenazadora.
-Pues que sepas, que a mí tus trucos y tus historias de libros para ligar me la sudan. Conmigo todas esas mierdas no funcionan (sic).
Bien. Las cartas están sobre la mesa. TBdeportista lo sabe casi todo. Ideal para ir con mi faceta de seductor por delante.
Poco más tenía que hacer al teléfono. Mi amiga me había dado valor más que suficiente y yo estaba demostrando confianza y seguridad en mí mismo. Alabé su sinceridad y le di la razón. Por supuesto, con ella, técnicas y trucos para ligar no funcionarían jamás.
Desactivadas sus defensas, continué creando conexión entre nosotros. Fue extremadamente fácil, pues es una chica muy abierta y con aficiones similares a las mías. Bueno, yo soy algo más intelectual y ella es más físcia, pero teníamos puntos de conexión. En cinco minutos había concertado una cita con Tbdeportista para esa misma tarde, tenía su móvil y ganas de verla en persona.
Quedamos a las siete de la tarde en su casa. Horas después, volvimos a ella para acostarnos juntos.
TBdeportista es la chica más cariñosa y dulce que he conocido estas vacaciones, aún sigo echándola de menos.
chapeau evil, tengo gans de verte en acción, tras esto, lo del supermercado y conocerte en persona
un abrazo
gracias. Espero verte el viernes en la charla, colega!
Evil, muy buena la historia, y con una final fantástico que, sinceramente, no me esperaba.
Hasta pronto!