Reflexiones sobre el cierre de beso (parte 1). Manteniéndome Alfa por Dionisos

Hola a todos,

Aunque sólo fuese por lo que me divierto analizando los sargeos y captando los matices psicológicos en mis relaciones con las TBs, esto merecería la pena.

Os cuento un sargeo del finde en el que voy a destacar los Aros Psicológicos que nos tienden las mujeres para meternos en su Marco y cómo, en este caso, pude superarlos.

Iba con dos amigos y uno de ellos llamó a una follamiga para pasar caliente la noche. Llegamos al bar y está ella y una TB6. Son las 4 de la madrugada, así que decido meterle caña.

No recuerdo muy bien la conversación, sólo recuerdo que la llevé hacia el tema sexual. En un principio la TB no me hacía mucho caso, pero voy a mencionaros una serie de Aros que, una vez superados, hicieron que se volcara cada vez más sobre mi. Yo estaba perfectamente falcado sobre la barra, por cierto.

Como os digo, la conversación giraba en torno al tema sexual.

TB: No me parece muy normal hablar a una tía que acabas de conocer de estas cosas.

Aven: Ya es que yo soy una persona muy sexual (muy serio, sin darle importancia).

TB: A mí me parece más bonito ser sensual.

Aven: Ya, pero he dicho sexual…

TB: No sé porque coño te tengo que hablar a ti de estos temas, que no te conozco de nada.

Aven: (Me mantengo mirando hacia otro lado durante 5 segundos.)

TB: Pues mira la verdad es que lo que a mi me gusta es…

Esto me lo hizo 3 veces.

TB: Mira esa se parece a Betty la Fea. ¿Por qué no intentas follarte a esa?

Aven: Ya, el problema es que yo sólo me acuesto con las que me gustan.

TB: (Mirando continuamente al reloj.) Es tarde, no sé si me voy a ir.

Aven: No sé que harás tú, pero yo en 5 minutos me voy.

Aquí se noto un cambio tremendo en su lenguaje corporal, la TB me encaró y empezó a intentar llamar mi atención. La empecé a mirar en plan sexual a lo bestia y la TB se puso nerviosa perdida, no paraba de soltar frases muy rapido y sin sentido.

La agarro de la cara con las dos manos y me lanzo, pero la TB se aparta. No le doy importancia, me recuesto sobre la barra y ya viene mi amigo para que nos vayamos.

No cerré con teléfono, en ese momento me bastó lo que había hecho. Me quedo con la sonrisa que me dedico la TB al despedirse en comparación con la cara de palo que tuvo los 30 minutos que estuvimos hablando.

Creo que me falta todavía mucha seguridad para cerrar con beso y eso lo notan.

Un saludo.

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Mario Luna, fundador del Equipo Seducción Científica y autor de las obras
Sex Code: El Manual Práctico de los Maestros de la Seducción ©2007
Sex Crack: Conviértete en un Maestro de la Seducción ©2009
Apocalípsex: Los 10 Mandamientos de la Seducción ©2011